31/1/08

La morada del polvo

No hay nadie que no lo quiera. En la boca de ellos es motivo de orgullo y de exageración. Que se echaron cuatro seguidos, que tardaron no se cuántas horas en expulsarlo, y que todo fue con “tal” rubia fatal: en boca de ellas el polvo a veces es ridiculizado. Que tal no duró un minuto, que la tiene así y así, o que a tal mujer le dicen asepsia, porque no conoce el polvo. Ahora, plumas más vulgares también agregan que en boca de ellos el polvo es indicación de que se está en presencia de un gay y que en la de ellas indica que su portadora es muy gauchita. Ahora bien, siempre se habla de él como propiedad, cualidad y defecto de otros, pero nunca se ha dicho nada de su vida. Sirva este texto como expiación del polvo.
Todos los polvos viven en un barrio privado (¿Polvo Country Club?), que para ellos es como su planeta, pues no existen otros. Los sectores se diferencian y sus habitantes se amontonan; hay individuos auto proclamados más intelectuales que viven teorizando sobre la existencia de vida más allá del barrio, pues ignoran que son parte de un todo, donde cada parte por sí sola no significa nada y donde el todo sin cada parte no es completa. Conocida las características y propietarios de todas las casas, las he apodado. Está la casa de los polvos sin estreno. En esta casa los polvos se amontonan a millones y cuando el aglutinamiento es tal que nadie logra salir, el exterior de la casa se llena de extraños granos. Cuando un polvo logra salir, es enviado a otra casa, relativamente más tranquila. En el trayecto el polvo oye grandes referencias a su performance y es narrado una y otra vez. Es el polvo más recordado y aunque no tengo pruebas de su existencia, se dice que en medio del barrio su estatua memoriza el momento. Esta nueva morada se llama la casa de los polvos inestables, porque pueden pasar meses sin que salga ninguno. Bien, este tipo podría corresponder a la etapa adolescente pero se han encontrado pruebas de que mora en otras casas también.
La casa efímera es de las más temidas, porque sus habitantes nacen y mueren rápidamente. Se trataría del hogar de los polvos de los eyaculadores precoces. Hay una casa llamada materialista, donde suelen haber muchas fiestas y donde no hay actividad si no hay dinero. Es sin dudas, la casa de los putangueros. Hay una vivienda llamada de los polvos tristes, cuyas pruebas sugerirían que pertenecen a la rutina de los casados. Pegada está la casa de los polvos nómades, que hay días que viven en la casa de los polvos tristes pero suelen mudarse a escondidas a la casa de al lado, donde sospechosamente cambian de humor. Se trataría de los polvos de los infieles. Hay otra casa que es constantemente profanada por una mano ajena. En este pequeño planeta se ha erigido una religión que asegura que la mano que entra y sale expulsando muertos, es Dios que premia y castiga, fe que ha conseguido muchos fieles y la construcción de grandes templos que habitan los pregonadores de esta teoría. Yo, por lo bajo, pues no quiero derribar creencias, aseguro que se trata de la casa de los pajeros. Hay otras tres casas, o mejor dicho dos, pero una con doble piso. De una su acceso me fue vedado y sobre ella se cuentan historias de curas y violadores. De la otra con doble piso puedo decir que abajo habitan polvos resignados a esperar su fecha de vencimiento, pues aunque lo ignoran, están en la casa de los viejos que ya no la usan. Arriba habitan otros polvos quienes para el misterio e intriga de sus colegas de la planta baja, han retomado sus actividades. No lo saben, pero es la casa que creó el milagroso Viagra.

16 comentarios:

Anónimo dijo...

Buenisimo amigo, que polvo este cuento, polvo de los buenos de los bien hechados, de los duraderos y satifactorios. Te felicito che.

J. dijo...

gracias pablo. el relato es un fierro...

Anónimo dijo...

ayyy me encantó javi que bueno está. nunca lei algo sobre sexo tan bien contado.

besotes

Félix dijo...

Ja, ja, ja, ja... Mirá vos, no sabía que el sexo escondía tantas cosas dentro de sí, ja, ja, ja, ja...

J. dijo...

felix: viste... el sexo es un mundo inexplorado.

...flor deshilvanada dijo...

Volví a leerte, tu humor sigue siendo igual, me encanta!

Ando a las corridas, pero paso y comento, así después no decís que me perdí ;)

Besosss

Anónimo dijo...

dejaré un comentario con la esperanza de no ser incinerado como en el post anterior: no sabia que dentro de mi gran amigo había tanta vida
jaja
en serio, muy bueno el relato.

UMA dijo...

El sexo es un mundo poco explorado, tal cual, ahora tenes que postear acerca de que cuando alguien vive el sexo con "ahìnco" las titulan de putas, y lo contrario cuando no se mueven lo suficiente "frìgida",
Me embolan todos los motes, ojalà la gente se deje de tanta boludez y le ponga onda para ser màs felices sexualmente, joder, que nos vivimos quejando pero ejercemos poco:)
Muy buen post, por suerte en mi casa le dimos salida al polvoso aburrido jajaja
Besos, lindor!!

J. dijo...

evan, el regreso jaja. saludos

r.k. en cualquier momento aparece ella a responderte.


Uma: interesante tu casa, asegurate que él no se mude a la casa de al lado jaja

Anónimo dijo...

Bien pensada la metàfora del barrio, me gustò mucho.Te faltò el polvo que sale de una casa cualquiera y se pierde en el camino y se mete en una cueva estrecha y oscura sin salida; la de los gays.
Me vino un deja vu de una pelìcula de Woody Allen, no sè.

J. dijo...

@zippo ese sería el polvo de la casa con un depto atrás... :)

Laura dijo...

Muy buena entrada, linda forma de referirse a esos polvos que los ("nos") hacen felices a veces (?).
Saludos

Zoca dijo...

Este es un post genial!
es la primera vez q entro a leerte, tenes un lugar muy acogedor... Pienso seguir visitando.
Te mando un beso...
Amaranta.-

J. dijo...

gracias laura y amaranta.

mañana actualizo

Caverta Online dijo...

Excelente informacion para muchos jovenes el sexo es un juego pero algunas veces deben de pensar mejor las cosas, yo en lo personal sufro impotencia y tomo viagra para poder tener relaciones

buy generic viagra dijo...

Te faltó el polvo que sale de una casa cualquiera y se pierde en el camino y se mete en una cueva estrecha, oscura sin salida y asquerosa; la de los gays.